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Lunes, 2 de Diciembre del 2024
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Análisis de las débiles excusas republicanas para la falta de acción en el tema migratorio

Por: María Ponce

Y por qué la indetenible demografía y las implicaciones políticas terminarán por ganar.

Washington DC.-

A continuación, America’s Voice ofrece su evaluación de algunos de los recientes avances en el debate sobre la reforma migratoria. Tres razones por las cuales las más recientes excusas republicanas para bloquear la reforma migratoria son evidentemente débiles:

Los votos existen en la Cámara Baja para aprobar la reforma migratoria ahora mismo: el voto de la semana pasada en la Cámara Baja en torno al techo de la deuda demostró una vez más que “una mayoría que rige” existe en la Cámara Baja para aprobar legislación prioritaria. La llamada “Regla Hastert”, la supuesta regla de hierro con la que sólo avanzan proyectos que reciben apoyo de la mayoría de la mayoría, es ahora oficialmente la “Excusa Hastert”; el voto en torno al techo de la deuda fue la quinta vez en este Congreso en que Boehner la ignoró.

En inmigración, los votos existen para aprobar la reforma, si Boehner permite un voto para que eso suceda. Si es un cálculo político, ¿por qué los republicanos de la Cámara Baja no están Actuando en inmigración?

Según The Washington Post, los republicanos están declarando abiertamente que no perseguirán legislación de “gran envergadura” como la reforma migratoria este año y en lugar de eso priorizarán el “apaciguar divisiones”, evitando el “drama intrapartidista” y construyendo “el camino de los republicanos de cara a las elecciones de medio término de noviembre”.

Si el reporte de Post es cierto y los republicanos de la Cámara Baja siguen bloqueando la reforma migratoria, esto significa que la única acción en el pleno de la Cámara que los republicanos habrán tomado en este Congreso será su voto en favor de la enmienda del extremista antiinmigrante Steve King (R-IA) para quitar fondos al programa DACA y someter a los DREAMers a la deportación.

¿Esperar hasta 2015? Eso no va a pasar: La idea de que los republicanos puedan bloquear la reforma migratoria en 2014 pero retomar el tema en 2015 no está en sus manos, a pesar de la gran cantidad de republicanos que están haciendo esta afirmación recientemente.

Como el senador John McCain (R-AZ) dijo en CNN el domingo pasado: “Esperar hasta 2015 cuando estaremos involucrados con las primarias republicanas, obviamente no sería un escenario viable”. Y el Wall Street Journal en un editorial reciente dijo que “los opositores elevarán el mismo furor siempre que surja el tema y los demócratas serán menos propensos a ceder pensando que pueden utilizar el tema para llevar a las minorías a votar en 2016”.

A pesar del persistente bloqueo de la Cámara Baja republicana a la reforma, presentamos aquí tres razones por las cuales creemos que la reforma migratoria ya viene: El pueblo estadounidense respalda fuertemente la reforma migratoria, y los votantes republicanos, sorpresivamente, apoyan: el pueblo estadounidense respalda amplia y consistentemente la reforma migratoria con vía a la ciudadanía, con votantes republicanos más pro reforma y pragmáticos en el tema de lo que sugiere la creencia popular.

Una nueva encuesta de Gallup encontró que el sentimiento público se mueve aún más en una dirección pro reforma, en la que los estadounidenses dan igual importancia a un plan para hacer frente a la población indocumentada y a las medidas de seguridad en la frontera. Gallup hace notar en el sumario de su encuesta que este “es un cambio en relación con el pasado, cuando los estadounidenses eran consistentemente más propensos a considerar la seguridad fronteriza como extremadamente importante”.

La demografía es indetenible y las consecuencias políticas de la inacción son severas: la obstrucción republicana a la reforma migratoria consolidaría su imagen antiinmigrante los segmentos del electorado de más rápido crecimiento, lo que significa que sus perspectivas de retomar la Casa Blanca en 2016 y años posteriores estará en peligro.

John Feehery, un exasistente del liderazgo de la Cámara Baja y actualmente asesor republicano, dijo recientemente: “Si no aprobamos la reforma migratoria este año, no volveremos a ganar la Casa Blanca en 2016, 2020 ó 2024”.

Más allá de la presidencia, analistas están haciendo notar cada vez más que la inmigración podría perjudicar asimismo las oportunidades de los republicanos en una serie de contiendas electorales en 2016. Por ejemplo, los republicanos estarán defendiendo 24 asientos del Senado en 2016 –siete en estados ganados por Obama–, mientras los demócratas necesitan defender solamente 10. Es posible una mayoría a prueba de obstruccionismo. La inacción en 2014 podría significar que el Republicano está condenado como partido nacional en 2016 y años posteriores.